Indiana Jones

Seguimos con nuestros vicios.

Como no solo de Ciencia Ficción vive el hombre (a priori) si no de toda palabra que proviene de Spielberg, fuimos a ver Indiana Jones y el Reino de la Calavera de Cristal.

Lucas es "Dior" y Spielberg su Profeta (¿no era eso Luis F.?)

Bueno, como siempre se antepuso una estupenda cena en uno de los múltiples locales de Heron City, En este caso en el "Pizza Marzano". y de ahí a los cines Kinepolis.

No es que se pueda decir que el restaurante fuera para arrodillarse y dar gracias a Armani, pero la comida era correcta, el servicio atento, y para ser sábado y estar más lleno que la ficha policial de algun político local que yo me se, la cocina fue aceptablemente rápida.

Ni que decir tiene que lo mejor del restaurante, como siempre, la compañía... estuvimos Luis F., su media naranja Virginia, nuestro novísimo a estrenar socio Pedro, su siempre encantadora esposa Agus, Omar, un amigo de ambos y nuestro ya tambien, Jaime y su respectiva asimismo, Antonia, Dani y un servidor de Uds.

Conversación animada y variopinta que en mi caso pasó de los viajes, pasando por la alta y baja cocina y trescientas cosas más.

Luego la película. A la proyección se añadió Guillermo y unos amigos suyos con lo que al final contábamos con creo que 13 butacas, casi una fila para nosotros solos.

La película, bueno, no la destriparé por si Luis F. la quiere comentar en su espacio de nuestro podcast (www.fueradeorbita.org) pero estuvo en la linea de Indiana Jones, en ese sentido no defraudó. Mucha acción, persecuciones, y momentos divertidos. Como debe ser, los malos muy malos, los buenos muy buenos y los tontos muy tontos... bastante entretenida y agradable de ver si uno tiene claro a lo que va, como era nuestro caso.

Mención aparte merecen los comentarios al respecto de la edad del Sr. Ford (que hay que reconocer que se conserva como si durmiera en formol) y el cachondeo con que, o bien renombrábamos la película ("Indiana Jones y La Dentadura de Oro" o "Indiana Jones en Busca del Andador de Diamantes" fueron algunos de los propuestos) o bien nos preguntábamos si lo de la calavera de cristal hacía referencia al estado de osteoporosis de la cadera del Sr. Ford, que a estas edades hay que cuidarse el esqueleto...

En fin, como siempre una velada estupenda en buena compañía.

Carles